Había prometido que hoy publicaría el abecedario para imprimir pero lo pospongo para la próxima publicación y adelanto esta para que tengas tiempo de elaborar el calendario de adviento que elijas.
Sí, son seis las entradas que le he dedicado los años anteriores a los CALENDARIOS DE ADVIENTO. Ya sabes que es uno de mis adornos de Navidad preferidos, puedes verlos AQUÍ.
En los que te presento este año la particularidad más importante es la sencillez en su elaboración. Recuerda que el regalo debe ser sencillo, al alcance de cualquier bolsillo: un caramelo, unas peladillas, un bombón, una goma de borrar, etc; e incluso puede consistir, sencillamente, en una frase, un premio, como que esa noche lo dejarás dormir en tu cama, que lo llevarás a dar un paseo en la bici o de visita a la casa de su primo preferido. Es, además, una forma de hacerles ver que las cosas materiales no son las más importantes.
Hay uno muy original, consiste en una carpeta en la que el propio niño elabora el calendario día a día. Me parece el más entrañable de todos porque bien programado puede ser un recuerdo precioso para cuando sean mayores. Solo tendrán que escribir o pegar en cada hoja, que puede ser una cartulina, el número del mes y todo lo acontecido en el día, una especie de diario: qué hizo en el colegio, algo sobre sus amigos, qué película vio, qué postre le gustó, alguna foto, etc. Naturalmente será necesario adaptar el contenido a la edad del crío, el de la niña de la foto aprovecha las tarjetas de Navidad y a mí me voló la imaginación sobre como lo haría yo, je, je.
